sábado, 15 de septiembre de 2012

Primera quincena en Lyon: diferencias y similitudes

Este año estoy de estudiante Erasmus en Lyon. Con esto quiero avisar: no voy a actualizar mi página demasiado (siguiendo con mi mala habitud), pero esta vez será por una causa mayor. En este artículo quiero compartir mis primeras impresiones, viendo las diferencias que veo y también los puntos en común con Valencia, o en todo caso con España.
En primer lugar, la limpieza. Lyon está a todas horas (excepto las noches de botellón (sí, también lo hay)) limpio. En parte porque la gente en general no tira nada al suelo, y en gran medida porque hay cientos de personas encargadas de la limpieza. Es algo que me ha sorprendido: hay limpieza del suelo del metro, de las cabinas del metro, de las papeleras y asientos de los mismos, de los parques, incluso de las farolas. Sí, tienen más dinero para financiar esta limpieza, ya que se recauda más con los impuestos, también porque el salario mínimo y los salarios en general son más altos que en España. Gracias a toda esta serie de trabajos, hechos normalmente por franceses de origen norte de África (muchas veces se disfraza esto con planes de integración y de ayuda de estos grupos), hay una sensación de limpieza general.
En segundo lugar, los transportes. Cuesta el viaje sencillo (te sirve para hacer enlaces entre metro, tranvía y bus durante una hora) 1'60, con reducción del bono de 10 (a 14 euros) y también para los estudiantes (los 10 viajes a 12). El metro es rápido y silencioso y, como no, limpio. Muchos de los metros están sin conductor, van solos, con energía eléctrica. Junto con el servicio de limpieza, el metro cuenta con un cuerpo de revisores, apoyo a los viajeros (también para organizar la salida y entrada de los vagones), y personal de seguridad. Muchos de estos trabajos son hechos por la misma persona, no hay demasiada especialización, pero, de nuevo, son trabajos de un horario reducido y muchas veces relacionados con la integración social. Además de esto, está los taxis (mucho más caros que en España) y en la parte turística los bici-taxis (os lo juro), los barcos turísticos, y los autobuses.
Respecto al turismo. Tienen muchos servicios, también financiados por el impuesto de estancia (taxe de séjour) de 1'75 euros por persona y noche. Las oficinas de turismo, los baños públicos de Grand Lyon (que es la agrupación de Lyon y su "aglomeration", encargada de la limpieza, los transportes, los parques...), las rutas turísticas, las tiendas de souvenirs (las hay por todas partes, pero de gestión pública (no he investigado sobre su propiedad))...
La restauración y la comida... Bueno, da la sensación de que los franceses comen poco. El menú de un plato con café y pan suele rondar los 8-10 euros. Y está siempre lleno... Después, siempre están los lugares de comida para llevar, aquí muy de moda, sobretodo los de pasta y wok para llevar. En los bistrot o incluso en los cafés, sobre las once y media de la mañana se transforma la terraza en un restaurante, para mí casi de lujo, con su mantel, su cubertería bien colocada, las servilletas con forma de flor, las copas en cruz... Buscan mucho la "belleza" y, claro, las apariencias. Respecto a los supermercados. De normal tienen más productos que los nuestros, incluso con secciones de comida preparada relativamente bien de precio (para el nivel francés, quiero decir). Lo que más me sorprendió fue la sección de comida de Francia, y sus regiones: todos los supermercados tienen una. Los franceses tienen un fuerte sentimiento nacional, y esto les hace preferir los productos "Origen Francia" que los otros, aunque cuesten bastante más. También los de las antiguas colonias, del tipo Túnez y Argelia. Por un lado, siento bastante envidia, porque es una prioridad absoluta. Y, por otro lado, le pagan poco a los agricultores, aunque mucho más que a los españoles. Esto se une al hecho de que los productos de otros países (al menos los más o menos elaborados) están muy caros. Por ejemplo, una tortilla de patatas (con o sin cebolla) cuesta no menos de 2'50. Del jamón serrano ya ni hablamos, cerca de cuatro euros los 150 gramos. Sin contar con el hecho de que, además, casi que solo hay jamón de bellota, curación 24 meses, con lo que ¡imaginad!
Por otro lado, los coches van mucho más rápido y hacen maniobras cada dos por tres. Y, por supuesto, no paran en los pasos de peatones. Es más, si te ven pasar, muchas veces aceleran. ¿Buena educación francesa? Solo en los comercios, sitios turísticos y en ciertas administraciones. La gente se cuela cuando tú entras en el metro (como en España también), se choca contigo en la calle y no dice nada, se da cuenta de que no eres francés/a y o no te habla o se queja de tu acento (del tipo "e o eu") o no te indica bien la calle que estás buscando. Esto no todos, por supuesto. Pero es más fuerte en las personas adultas. Los jóvenes  (universitarios, eso sí) ya están bastante acostumbrados a los Erasmus y a los estudiantes internacionales y nos tratan muy bien, muchísimo mejor que nosotros tratamos a los Erasmus.
En general, l@s franceses/as visten muy bien, bien combinados, a la moda, divinos siempre. Los niños pequeños especialmente (parecen sacados de un catálogo de Benetton). Eso sí, están juzgando siempre la tenue (esto es, el aspecto, la ropa) de todo el mundo, y van con el mentón levantado, como diciendo: "Soy francés, soy mejor que tú...", aunque esto es solo una suposición. De ahí que haya toda una serie de prensa y de programas, revistas, incluso libros, de moda. Sí, en España también los hay, pero no es lo mismo. Sobre Hollande, en su momento, casi que se fijaron más en el trío amoroso que en sus propuestas. Y eso es mucho decir.
En las administraciones no hay manera de entenderse. Tampoco te lo ponen fácil. Hay que entregar muchos papeles para todo. Para abrir una cuenta, para inscribirse en la universidad, para tener un teléfono móvil... Y eso que el programa Erasmus ha mejorado mucho las cosas, porque los estudiantes no comunitarios lo tienen mucho más complicado.
Para terminar, decir que con el horario francés de comidas (7h el desayuno, 12 horas la comida y 19h la cena) se tiene tiempo para hacer de todo por las tardes. Es más, se hace eterno, al menos mientras no tienes clase o trabajo. Pero, está pensado sobretodo para el trabajo o para tener más horas de clase, no para que la población se sienta mejor o tenga mejor digestión.